En México
- ¡MUCHÍSIMO OJO! El grupo parlamentario de MORENA en la Cámara de Diputados formalizó una iniciativa que busca cambiar la Constitución. ¿Y ahora qué quieren? Recortar de 9 a 3 años la presidencia del Instituto Nacional Electoral. ¿Y esto por qué es TAN importante? Porque de aprobarse, MORENA podría quitar al actual presidente del INE, Lorenzo Córdova. ¿Por qué lo quieren quitar? MORENA dice que la reducción de 9 a 3 años es para «generar mayor dinamismo en la toma de decisiones». Pero, la realidad es que esto abriría la posibilidad de que, con la mayoría de MORENA en la Cámara de Diputados, la presidencia del INE recayera en una o un personaje afín al movimiento lopezobradorista (como ocurrió recientemente con la Comisión Nacional de Derechos Humanos). ¿Y luego? Pues por ahora, académicos, analistas y expertos han condenado el intento de MORENA y han calificado la iniciativa como un atentado a la democracia. ¿Y entonces? No podemos perder de vista esta situación y siempre defender la autonomía y los contrapesos (tal y como Andrés Manolo y sus seguidores lo hubieran hecho desde la oposición).
- ¡Ya hubo humo blanco en la Universidad Nacional Autónoma de México! El viernes pasado, la Junta de Gobierno de la UNAM decidió reelegir a Enrique Graue Wiechers como rector de la Máxima Casa de Estudios por los próximos cuatro añotes. Graue, que fue electo como sucesor de José Narro en 2015, es médico oftalmólogo de la UNAM y previo a su nombramiento como jefe de jefes de la Universidad, se desempeñaba como director de la Facultad de Medicina. Usted que lee Belisario.mx sabe que Graue competía contra Pedro Salazar Ugarte, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, y Angélica Cuéllar, directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad, a quienes la Junta de Gobierno les dijo el famoso «gracias por participar».
En la Cartera…
- ¿Cómo va nuestro Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá? Como ya es costumbre, usted sabe que en Belisario.mx no perdemos de vista este importante proceso, así que ahí le va lo último. Congresistas estadounidenses declararon este fin de semana que la ratificación del T-MEC podría darse en un plazo máximo de dos semanas. ¿Qué qué qué? Así como lo lee, los congresistas gabachos buscan ratificar el T-MEC antes de que se termine la actividad legislativa de 2019 (a la cual le quedan 16 sesiones). ¿Y por qué tenemos tanta prisa pa que se apruebe? Recuerde que el próximo año hay elecciones presidenciales y la cosa se puede poner demasiado tensa como pa’ que aprueben nuestro T-MEC. *La redacción permanece con los dedos cruzados*
- El Instituto Nacional de Geografía y Estadística (el famoso tío INEGI) nos sigue dando noticias preocupantes. ¿Y ahora qué pasó? De acuerdo con el último corte del Indicador Mensual del Consumo Privado en el Mercado Interior, el consumo de bienes y servicios se mantuvo estancado en agosto. A pesar de que analistas preveían una actividad un poco mejorcita para el mes de agosto, el gasto de las familias mexicanas cayó 0.1% de julio a agosto. ¿Y eso es mucho o poco? Es la mayor caída desde marzo. Eeeso sí, recuerde que esa medición es de agosto y de ahí en adelante se medirán las fiestas patrias de septiembre, el Buen Fin de noviembre (que ya es este fin, por cierto) y luego las compritas navideñas de diciembre. Así que, la predicción de Belisario.mx es que se vienen buenas noticias en los próximos meses. ¡Ánimo!
En el Mundo…
- ¿Qué carambas está pasando en Bolivia? Primero lo primero. Ayer se consumó un Golpe de Estado en Bolivia. ¿Por qué lo llamamos un Golpe de Estado si Evo renunció? Ahí le va todo el contexto que puede caber en este parrafito: 1) En noviembre de 2016, el presidente Evo Morales perdió un referéndum en el que buscaba que la ciudadanía le permitiera buscar la reelección por cuarta vez consecutiva. A pesar de ello, el Tribunal Superior Electoral sentenció en contra del referéndum y le permitió buscar oootra reelección (por cierto, desde 2009, Evo impulsó una reforma que le permitiera reelegirse en 2010 y en 2014). 2) El 20 de octubre pasado se llevaron a cabo las elecciones y sucedió algo extrañísimo, se interrumpió el cómputo de votos, se revirtió la tendencia y el Tribunal le dio a Evo Morales el triunfo sin necesidad de una segunda ronda. 3) Ante ello, la Organización de Estados Americanos publicó un informe en el que se enlistan muchísimas irregularidades y en la que se deja claro que hubo un chanchullo en el cómputo y que se trataba de un fraude electoral. 4) Bolivia salió a las calles, hubo protestas y la cosa se puso tree meeen daaa. Peeero, la Policía (rival del Ejército), se amotinó y decidió no actuar en las protestas. 5) Ante esa presión y constantes ataques a casas de sus colaboradores y amenazas, Evo salió a dar un mensaje este fin de semana en la que anunció su renuncia «para evitar la violencia» y llamó a convocar elecciones. 6) ¿Por qué se habla de Golpe? Porque se metieron los militares. El jefe del Ejército, Williams Kaliman, pidió la renuncia del presidente y junto con la Policía, se le voltearon a Evo. ¿Qué sigue? Quién sabe, por lo pronto hay caos y esperamos que se encuentre un cauce democrático y no militar.
- En otros temas que contrastan con Bolivia, este fin de semana salió de la cárcel el expresidente brasileño Lula da Silva. ¿Y eso? Resulta que tras 19 meses encarcelado por presuntos actos de corrupción, el Tribunal Supremo decidió modificar un criterio importantísimo. ¿Cuál? Que los condenados entren a prisión hasta que la sentencia sea firme. ¿Y en español? Que hasta que no le prueben que, en efecto, es culpable, Lula debería estar en libertad (la famosa e importantísima presunción de inocencia). OJO: hay recordar que a Lula lo metieron a la cárcel a unos meses de las elecciones en las que ganó el derechista y loquillo Jair Bolsonaro (quien hasta ahora no ha dicho nada) y cuyo actual ministro de Justicia, Sergio Moro, fue el primer juez que condenó a Lula. En otras palabras, ya que pasaron las elecciones en las que Lula era el favorito, las autoridades le dieron el famosísimo «usted disculpe».
*¡Échele ganitas que estamos cerca del puente!